El título que elegí para esta conferencia se llama La locura que viene de las ninfas. Este nombre tiene una condición doble, es el título de un texto de Roberto Calasso y a la vez es una frase escogida de la Ética a Eudemo de Aristóteles.
Cuando hablo de La locura que viene de las ninfas, me refiero, fundamentalmente, a tres temas: el amor, el delirio erótico y aquello que los griegos llamaban manía.
Son tres puntos ligados a la temática de la posesión.
Vamos a comenzar con un video que realizamos en Córdoba, con una artista plástica que es María Teresa Belloni, la autora de la escultura que semeja un ojo y hace su tránsito en el video, Susana Pérez que es una fotógrafa excepcional y Jorge Castro quien ha armado con gran talento el ensamble de una secuencia de fotografías de este video.
El guión ya estaba prefigurado cuando reuní a estos amigos plásticos, porque en La metamorfosis del objeto, un libro que escribí en 2004, partí de la idea del duelo bajo la forma de la sustitución por fuera de la experiencia analítica y de la pérdida de objeto en el interior de la práctica.
En La metamorfosis… establecí una correspondencia entre el análisis que realizara Pierre Rey durante diez años con Lacan y el tránsito de Dante en La divina comedia, como distintos tratamientos del pesar.
En el video que vamos a proyectar, encontramos una secuencia de fotos que sugieren algunos pasajes de La divina comedia.
Verán algunas imágenes, en donde hay un hombre fundido en rojo, una masa ígnea, como una suerte de descenso a los infiernos. Y la última parte del video, la relaciono al Empíreo, el cielo de La divina comedia, donde Dante hace coincidir a Beatriz con la fuente, la fontana.
Establecí en ocasión de La metamorfosis una vinculación entre la fuente y la mirada de Beatriz.
Hay dos momentos de pasaje, donde el ojo realiza un trazado y repararán en un adoquinado que está emplazado en Florencia en la calle donde fugazmente Dante y Beatriz cruzaron sus miradas.
Advertirán también la imagen de un cuadro de Fra Angélico, La Anunciación.
Son guiños, signos menores, para que las personas que vieran el video, pudieran orientarse.
Lo que también es posibilitado por el texto inicial del video, extraído de Nueve ensayos dantescos de Borges.
El video se llama La Niña de mis ojos. Tiene la resonancia de la mirada y a la vez recordemos que la niña es una parte anatómica de los ojos.
Por otra parte, La Niña de mis ojos evidentemente es y resaltamos ese es, Beatriz para Dante.
Tomen en cuenta que el texto de Borges reitera diversas figuras de la ausencia.
Beatriz cuya mirada solía colmarlo de intolerable beatitud. Beatriz que solía vestirse de rojo. Beatriz que la había pensado tanto que un día le asombró considerar que unos peregrinos, que vio en Florencia jamás habían oído hablar de ella, Beatriz que una vez le negó el saludo, Beatriz que murió a los 24 años, Beatriz de Folco Portinari, que se casó con Bordi.
Borges destaca la mirada y luego las diversas figuras de la ausencia...
Cuando hablo de La locura que viene de las ninfas, me refiero, fundamentalmente, a tres temas: el amor, el delirio erótico y aquello que los griegos llamaban manía.
Son tres puntos ligados a la temática de la posesión.
Vamos a comenzar con un video que realizamos en Córdoba, con una artista plástica que es María Teresa Belloni, la autora de la escultura que semeja un ojo y hace su tránsito en el video, Susana Pérez que es una fotógrafa excepcional y Jorge Castro quien ha armado con gran talento el ensamble de una secuencia de fotografías de este video.
El guión ya estaba prefigurado cuando reuní a estos amigos plásticos, porque en La metamorfosis del objeto, un libro que escribí en 2004, partí de la idea del duelo bajo la forma de la sustitución por fuera de la experiencia analítica y de la pérdida de objeto en el interior de la práctica.
En La metamorfosis… establecí una correspondencia entre el análisis que realizara Pierre Rey durante diez años con Lacan y el tránsito de Dante en La divina comedia, como distintos tratamientos del pesar.
En el video que vamos a proyectar, encontramos una secuencia de fotos que sugieren algunos pasajes de La divina comedia.
Verán algunas imágenes, en donde hay un hombre fundido en rojo, una masa ígnea, como una suerte de descenso a los infiernos. Y la última parte del video, la relaciono al Empíreo, el cielo de La divina comedia, donde Dante hace coincidir a Beatriz con la fuente, la fontana.
Establecí en ocasión de La metamorfosis una vinculación entre la fuente y la mirada de Beatriz.
Hay dos momentos de pasaje, donde el ojo realiza un trazado y repararán en un adoquinado que está emplazado en Florencia en la calle donde fugazmente Dante y Beatriz cruzaron sus miradas.
Advertirán también la imagen de un cuadro de Fra Angélico, La Anunciación.
Son guiños, signos menores, para que las personas que vieran el video, pudieran orientarse.
Lo que también es posibilitado por el texto inicial del video, extraído de Nueve ensayos dantescos de Borges.
El video se llama La Niña de mis ojos. Tiene la resonancia de la mirada y a la vez recordemos que la niña es una parte anatómica de los ojos.
Por otra parte, La Niña de mis ojos evidentemente es y resaltamos ese es, Beatriz para Dante.
Tomen en cuenta que el texto de Borges reitera diversas figuras de la ausencia.
Beatriz cuya mirada solía colmarlo de intolerable beatitud. Beatriz que solía vestirse de rojo. Beatriz que la había pensado tanto que un día le asombró considerar que unos peregrinos, que vio en Florencia jamás habían oído hablar de ella, Beatriz que una vez le negó el saludo, Beatriz que murió a los 24 años, Beatriz de Folco Portinari, que se casó con Bordi.
Borges destaca la mirada y luego las diversas figuras de la ausencia...
Para descargar la conferencia completa, junto a las imágenes, hacé click aquí.
Para contactos con Gerardo García, gerardomaximogarcia@hotmail.com