Así el libro comienza con el asombro frente a un paciente que juega a la guerra en la computadora de su consultorio y el autor escucha un discurso venido del juego: “Si usted está tranquilo en su casa es porque un marine está luchando en algún lugar del planeta”. Es un texto paradigmático, por un lado es la voz cruel del imperialismo y por otro la justificación de la violencia declamando la paz. La muestra atroz de cómo la ideología prepotente del imperialismo se inmiscuye en esos “inocentes” juegos infantiles. Esa “sorpresa” lo lleva a investigar acerca del qué hay detrás de la superficie de las pantallas y cómo comprender las escenas de violencia a través de la historia.
Vicente Zito Lema