La escucha analítica se orienta hacia el recorte de letras, en tanto estas enlazan una verdad del goce, que solo puede medio decirse.
En un primer recorrido, este libro explora distintas expresiones clínicas desde el ángulo de aquello que en medio del decir se revela como escritura para la escucha analítica. Así, las escrituras que se hacen presentes en el discurso, en el juego, en el sueño, en el síntoma; las que dan texto al fantasma, las que marcan el cuerpo.
En un segundo recorrido, la obra aborda lo imposible de escribir; el sinthome en su relación con el jugar infantil; la transmisión y el acto analítico. Finalmente, la escritura del analista, sus textos y los que estos escriben de él.