Este libro es producto de una tarea colectiva, realizada por un grupo interdisciplinario e interinstitucional que se autoconvocó a partir de la siguiente pregunta: ¿Cómo intervenir con quienes, aun siendo niños o adolescentes, presentan conductas sexualmente abusivas?
La abundante bibliografía sobre abuso sexual infantil se contraponía con los escasos desarrollos acerca de los ofensores sexuales juveniles. Por lo cual, y en función de encontrar herramientas tanto conceptuales como técnicas, decidimos por un lado interrogar nuestra casuística, y por otro dialogar con quienes venían trabajando –desde distintas disciplinas– con esta población. Luego de tres años pudimos concluir que cada caso requiere un abordaje singular, en el cual se articulen las intervenciones jurídicas, institucionales y clínicas, con la finalidad de interrogar un acto, que suele ser enigmático para el sujeto mismo. Enigma a descifrar en el trabajo clínico, y que conlleva a la responsabilidad subjetiva.
Concluimos que las intervenciones mencionadas, son decisivas en el pronóstico del caso, en tanto las mismas pueden abonar a una construcción identitaria que logre vínculos interpersonales responsables; o, por el contrario, consolidar una identidad trasgresora en el mundo relacional.
Durante el trayecto también pudimos revisar posiciones prejuiciosas que incidían en las prácticas, ligadas ya sea a diagnósticos estigmatizantes, o a la utilización de categorías que no contemplaban esta franja etaria (jóvenes menores de 18 años).
El dispositivo grupal que creamos nos fue enriqueciendo durante el recorrido, sorprendidos por el aprendizaje logrado decidimos compartir nuestras respuestas –por cierto tentativas–, para que otros avancen desde sus propios interrogantes.