¿Cómo se adquiere la “aptitud de analista”?
Freud ubica dos condiciones: el análisis propio, y un tiempo posterior a éste, referido a una continuación de los procesos de recomposición del yo (del yo de la segunda tópica, del cual su núcleo es el ello, sede del goce). La conclusión del análisis, es condición necesaria, pero no suficiente. Por lo tanto se designa como de pertinencia conceptual a esos procesos de recomposición del yo, en relación con los mecanismos de defensa.
[…] Pero Freud no sólo se refiere a dos tiempos (lógicos), sino que el término castellano “aptitud”, tiene en el original alemán dos palabras distintas y no son sinónimos, como lo hemos formulado.
Eignung se traduce como idoneidad, disposición, dotes. Este párrafo, va a ser respondido a partir de la convicción en la existencia del inconsciente dentro del propio análisis (sentido).
Tauglich, quiere decir capaz o hábil para realizar algo, saber hacer algo. No se trata de una idoneidad profesional, abstracta o legal.
Por lo tanto, respecto a la aptitud de analista, hallamos dos tiempos (el propio análisis y el tiempo posterior) y dos palabras con significados distintos que definen al resultado de esos dos tiempos.
[…] Pero, ¿acaso mi operación de lectura es mi rasgo herético? Me satisfago en ello, sin duda. Deconstruyo y construyo. No puedo dejar de hacerlo. Itera.
Del Prefacio de Osvaldo Delgado