Desde el momento en que Freud fundó el psicoanálisis, éste se estableció firmemente dentro de su campo... o tal parecería que así lo había sido. Pero si observamos este punto con más detenimiento, se vuelve aun más incierto por una razón fundamental: mientras más lo examinamos, más difícil es determinar cuál es el campo propio del psicoanálisis. Desde sus inicios, por ejemplo, el psicoanálisis se vio envuelto en debates sobre si su ámbito pertenecía más bien al campo de las ciencias naturales, o al ámbito de la filosofía y las ciencias culturales. En este sentido, este libro reúne cuatro intervenciones de una de las filósofas más destacadas del siglo XXI, que apuesta a entender las convergencias y divergencias entre el psicoanálisis y otras disciplinas.